Bueno yo posteo barook y despues noticias, bye bye...
Hoy es un día distinto, el aire se siente completamente diferente, el viento sopla dulcemente, dulce como para enamorarse de nuevo, para sanar viejas heridas, para descansar, es un viento de paz. El cielo azulado no muestra ninguna nube en el, parece que el mundo se ha puesto de acuerdo para demostrar una gran metáfora, Azaref se encuentra recostado en una de las carretas en las que viaja con sus hombres, Shaid es el encargado de guiar a los caballos, por ahora el solo descansa...
El cielo azul trae viejos recuerdos, de días alegres, el ya los había olvidado, pero esta a unas horas de llegar a casa, finalmente puede colgar su armadura, y con ella todo su cansancio y conciencia, y ser feliz por unos momentos, ver a su hijo, comer la comida de su esposa, pelear con Shaid ya que se coma su porción del alimento, todo estas predicciones del futuro vuelan dentro de su cabeza, finalmente cierra los ojos y decide dormir un poco, al momento que una sonrisa se dibuja en su rostro.
El hogar de Azaref no se encontraba en medio de la ciudad como la mayoría de los soldados, el era uno de esos extraños casos que vivían en los afueras de la ciudad, pero aun así contaba con los derechos y virtudes de la mayoría de los nobles de la ciudad,... bueno la palabra nobles se suele quedar grande para esa clase de persona, así que por eso el y su familia siempre han preferido el hospedaje de los humildes, olvidan lo asqueroso del dinero y se concentran en vivir.
Mientras atraviesan la ciudad en sus carruajes pueden notar el frió y silencio de la noche en un pueblo muerto, poco a poco la mayoría de sus hombres se separan, dirigiéndose a sus hogares, pronto solo queda la carreta de Shaid y el, ya queda poco para que lleguen a sus hogares, a lo lejos ven el fuego, ambos no pueden evitar sentirse alegres al imaginar la cena que los espera, como su mujer dijo, tal vez hasta hagan fuegos artificiales para celebrar su llegada.. Azaref esta ansioso.
Finalmente cruzan el ultimo arco que separa a la silenciosa ciudad del calor de sus hogares, Shaid comienza a gritarles a los caballos para que aceleren, conforme se acercan se ve mas brillante, mas iluminada, hasta que el calor se puede sentir en su piel, el brillo los golpea en los ojos, y una fiesta de llamas y fuego es la recepción que reciben... nadie ríe, nadie juega, solo las llamas infernales se encuentran despiertas esa noche, nadie sabia que ellos venían, solo el enemigo, el cual aprovecho el descuido de soldados del reino para atacar... si, el reino mando soldados a cubrirlos... pero envió los soldados que defendían las aldeas aledañas a la ciudad... para el reino ellos no son nada...
El impacto deja a ambos detenidos momentaneamente, hasta que Azaref finalmente se libera de la maldición de la incertidumbre, rápidamente salta de la carreta y comienza a correr en busca de su hogar, atravesando el mar de fuego que cubría todo el pueblo, su ropa comienza a arder, pero la adrenalina y el pánico que cubre su cuerpo en ese momento aisla el dolor de su mente, por ahora solo corre, corre a lo que den sus piernas, en su camino ve a otras familias salir de sus hogares, otros batallan contra algunos soldados enemigos... nada de eso importa, solo su familia importa, nunca estuvo tan lejos como hoy...
Con forme se acercaba noto algo que nunca había visto... un ser alado, con dos cuernos en su frente y grandes garras se encontraba mutilando a unas personas, no puede creerlo, su mente debe de estar jugando con el, por ahora el solo corre.
Finalmente, su casa no esta tan dañada por el fuego, apresuradamente entra a recatar a su familia... pero algo se interpone, al entrar una bestia con cara de león, cuerpo de hombre, y grandes garras y cola esta frente a el, amenazando la vida de su esposa he hijo, ambos están aterrorizados, ella lo abraza con todas sus fuerzas, mientras lágrimas salen de sus ojos y susurra el nombre de su amado... Azaref sin siquiera pensar se lanza contra la bestia y se lanza con su cuerpo contra ella, ahora su vida no importa, solo distraerla y que su familia escape, por suerte lo logro, y una cicatriz ahora se forma en todo su pecho.
Corran, yo la detendré!- grita con la fuerza que le queda.., su esposa al verlo queda impactada, lágrimas siguen saliendo de sus ojos, pero aun así toma al pequeño Julian y comienza a huir, Azaref se levanta, por suerte el golpe lo dejo cerca de su fiel espada de practica, lentamente la desenvaina y se prepara para dar el ultimo golpe de su vida, la criatura rápidamente se lanza ante el... Azaref corre a interceptarlo, pero la criatura es mas rápida que el, y da el golpe final primero....
Azaref esta en el suelo, la sangre fluye de todo su cuerpo, el trata de levantarse pero no puede hacer nada, su cuerpo no responde, así, mientras la criatura comienza a alejarse, el hace lo único que puede, maldice, maldice al reino que no defiende a quienes quiere, el reino que comenzo una guerra estúpida basada en el poder y egocentrismo, he incluso maldijo al dios que permite que esto pasara...pero principalmente se maldijo a si mismo por no ser capaz de defender a su familia...
En medio de la oscuridad... Azaref escucho una voz... "quieres defender a tu familia, derrotar al malvado, castigar al impuro, quieres acaso ser la voz de la justicia y demostrarle al mundo hasta donde lleva la maldad que rige sus corazones?" el solo dijo "si"... y la oscuridad desapareció...
Frente a sus ojos, un niño se encontraba, le brindo su mano, y sano sus heridas, torno su cabello en un plateado brillante, y le brindo una nueva armadura para luchar. Su espalda comenzo a brillar y un par de alas brillantes brotaron, dándole nuevas energías, y su espada, aquella vieja espada con la que comenzo su entrenamiento años atrás, se torno en un arma que resplandecía una increíble luz, el niño al terminar le dijo..."ahora eres mi ángel del castigo, y seras mio eternamente, ahora ve y salva a los tuyos, el tu ultima acción de libertad, después deberás de seguirme, ya que soy tú creador" Azaref simplemente acato la orden, derroto a todas las criaturas extrañas mandadas por el reino opuesto, y se retiro... En su mente el extraño niño apareció nuevamente y le dijo "Azaref murió esa noche, ahora eres Abharos, el ángel del castigo, espero que tu deseo de Venganza se cumpla..."
En ese momento, Abharos se levanto de donde yacía dormido, todas las criaturas del infierno que trataron de llevárselo anteriormente se habían ido, no sabe por que tenia ese recuerdo, su hijo murió hace mas de 800 años, su mujer igual, todo lo que una vez fue, ya no existe, el único legado que sigue existiendo desde sus días como un humano es esta estúpida guerra que comienzo con el, y tampoco ha decidido dejar de existir...
Por:Argen
0 Opiniones:
Publicar un comentario